Y el día de Nochebuena a las 13.30 horas fuimos convocados alrededor del pesebre para asistir un año mas a la Misa del Gallo.
Junto a Nuestros Titulares rezamos, pedimos salud, rezamos y sobre todo dimos las gracias por todo y por tanto.
Leímos el Santo Evangelio del día y encendimos las velas y la luz de Dios ilumino de esperanza, amor y fe nuestras almas y nuestros corazones.
El acto concluyo a las 13.50 horas.
Y como no podía ser de otro modo este culto estuvo dedicado al recuerdo de nuestros antepasados, amigos y familiares que ya descansa en la paz del Señor.
Se rezo por su eterno descanso y se recordó momentos entrañables que nos lleno de gozo el alma.
Y es que recordar a los que ya no están es un modo de hacerlos inmortales y de eso fue hoy nuestro culto de mes. De recordar con cariño y amor a los nuestros, a nuestros seres queridos.
Que Dios los tenga en su santa gloria.
Y a las 11.30 horas del Lunes Santo se abría la puerta de nuestra capilla y la Corporación cumplía con la tradición de casi cinco décadas.
Cuarenta y seis años de fe, de amor a Jesus Humillado y a Maria Bendecida.
Los nazarenos salían en un orden divino y perfecto. Nuestros Titulares que tanto nos dan, bañaban todo a su paso. El incienso inundaba el aire y purificaba las almas. El tiempo se paraba y corría a la vez.
Las petalada en nuestra casa hermandad, fue comedida y llena de cariño.
A las 13.40 horas nos recogíamos en olor a multitud y solemnidad. Habíamos cumplido un año mas.
Habias rezado una vez mas y habíamos vivido un Lunes Santo precioso y el cielo sonreía.
El pasado Sábado a las 15 horas, tuvo lugar en nuestra capilla el traslado en andas y Santo Vía Crucis de nuestros Titulares a sus tronos procesionales.
El acto se hizo a oscuras y solo iluminado por las luces de las velas, fue un acto de mucho recogimiento, paz y armonía.
Todo cuidado al detalle y con todo el amor y cariño del mundo.
Concluimos a las 15.33 horas y olor incienso inundaba nuestras ropas y nuestro corazón.
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