Un año mas en el IV día del Quinario hemos dedicado nuestras oraciones, a los que ya no están con nosotros a nuestros hermanos difuntos y a los difuntos de nuestros hermanos.
Además leímos I Tesalonica 4 del 13 al 17.
Este año cambiamos de hora la celebración de esta Misa, que se hizo por el medio día, lo cual nos vino muy bien porque la disfrutamos mas. El Altar estaba precioso, iluminado solamente con diez velas.
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